El pasado miércoles 2 de diciembre, la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, presentó ante el Parlamento de Wellington una moción en la que exponía que el país se declaraba en emergencia climática; la misma incluye el compromiso de reducir emisiones y residuos como así también ser libre de emisiones de dióxido de carbono para dentro de 5 años, el objetivo primordial de la mandataria.
«Esta declaración es un reconocimiento a la próxima generación. Un reconocimiento de la carga que tendrán si no lo hacemos bien y no actuamos ahora”, fueron las palabras que utilizó la mandataria haciendo hincapié en que hay que “actuar con urgencia” para evitar catástrofes venideras.
para declarar una emergencia climática. (Mark Mitchell/New Zealand Herald)
Con esta declaración, Nueva Zelanda se suma a España, Argentina, Canadá, Corea del Sur, Reino Unido y más de otros 25 países que ya han declarado emergencia climática; aunque Ardern fue más lejos: se comprometió a realizar una transformación energética en el país y reducir emisiones contaminantes. ¿Cómo pretende llevar adelante esta transformación? En parte retirando las calderas de carbón y comprando autos eléctricos.
Además, en declaraciones anteriores, ya había anunciado planes para que el país plante mil millones de árboles, abandone de forma gradual las prospecciones petrolíferas y gasíferas, y haga que la red eléctrica funcione por completo con fuentes de energía renovables para 2030.
La propuesta presentada por el Partido Laborista, que gobierna con mayoría absoluta desde el pasado 17 de octubre, fue aprobada con el apoyo del Green Party y del Māori Party: 76 votos a favor y 43 en contra. El partido Nacionalista y el ACT New Zealand se encuentran entre los votos en contra.
Cabe mencionar que dicha propuesta de ser libres de carbono habilitó excepciones para el sector agrícola y ganadero, quienes son los que poducen gran parte de los ingresos del país.
¿Qué implica esta declaración?
La moción afirma que el cambio climático es uno de los mayores desafíos que afronta la humanidad y promete un compromiso para reducir el calentamiento global. Añade que el cambio climático tendrá un efecto devastador sobre Nueva Zelanda en forma de inundaciones, incendios forestales, subida del nivel del mar y disponibilidad de agua; “depende de nosotros asegurarnos de demostrar un plan de acción y un motivo de esperanza”, sostuvo la Primera Ministra.
Acá les compartimos el video de la moción presentada por Ardern (vía The Guardian) ↓ ↓
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