El 2 de Noviembre es un día muy especial para México y toda su gente. Y como es de suponer cada persona que se va de su tierra lleva consigo todos los saberes aprendidos de su cultura y cuando las personas se unen logran maravillas. En Melbourne, Australia la comunidad mexicana conserva esos lazos y los comparte mostrando a la población del Down Under de qué se trata el famoso Día de los Muertos.
Del 27 al 29 de octubre de 2023 los Jardines de Flagstaff se vistieron de colores, sabores y sonidos bien latinos con el Arriba Melbourne Mexican Festival, una celebración de la cultura. Por el césped se pasearon los mariachis, la Catrina, interpretaciones de Frida Kahlo, junto a diversos artistas que alegraron tardes y noches en la ciudad.
Artesanos e importadores también tuvieron su lugar exponiendo las famosas máscaras de lucha, calaveras pintadas de todos los tamaños, sombreros y maquillajes para entrar en ambiente. Y cómo no hablar de los sabores! un poquito de picante para calentar el ambiente, enchiladas, tacos y más platillos acompañados de un tequilazo con limón y sal. Así es ¡VIVA MÉXICO!
Fotos: Sofía Jaimez Bertazzo
Pero más allá de compartir con la comunidad Latina y sentirse más cerca de casa, el Día de los Muertos es un día para honrar a los seres queridos. Los mexicanos recuerdan a sus difuntos visitando los cementerios y preparando altares en cada hogar. Cuenta la tradición que las almas de las personas cercanas vuelven durante estos días para estar cerca de las personas que aman.
Los orígenes de la celebración del Día de Muertos en México, se remiten a los indígenas de Mesoamérica. Cuando llegan los colonizadores, la fiesta de los descarnados y demás celebraciones en honor a los muertos se mezclaron con la imposición evangelizadora europea y terminaron dando origen a lo que hoy se conoce como “Día de los Muertos”. Esta conmemoración es sello de la identidad mexicana y comenzó a formar parte de la lista del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura). Por lo que su conservación y fomento resultan realmente importantes para preservar las raíces.
Tradicionalmente los altares se conforman de diferentes niveles y dependiendo de las costumbres familiares se usan distinta cantidad. Los altares de dos niveles, son los más comunes en la actualidad, representan la división del cielo y de la tierra. Los de tres niveles se componen del cielo, la tierra y el inframundo, aunque también se les pueden referir como los elementos de la Santísima Trinidad. Los de siete niveles simbolizan los pasos por los que tiene que pasar el alma para entrar en la otra vida de acuerdo a las creencias mexicanas.
Un altar tradicional suele contener: alimentos, sal, velas, copal, bebidas, flores, fotografías y objetos personales del difunto. Es decir, ofrendas que se preparan para recordar a los que se han ido. La flor de Cempazúchitl es uno de los elementos más importantes en esta celebración, su nombre proviene del náhuatl “Cempohualxochitl” que significa “veinte flores”. Simboliza la conexión entre la vida y la muerte, se dice que su color y aroma guían a las almas hacia las ofrendas.
Como todo suceso cultural con el tiempo fue incorporando y cambiando cosas. Por ejemplo “La Catrina” es uno de los personajes más emblemáticos de estas fechas y fue una creación del pintor, ilustrador y caricaturista mexicano de Aguascalientes, José Guadalupe Posada. Más tarde Diego Rivera recuperó la figura y la incorporó vestida en su mural “Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central”.
Imagen: Museo José Guadalupe Posada, Aguascalientes México