Vamos a terminar nuestro curso de iniciación con una breve explicación sobre el revelado de nuestras imágenes RAW. Cuando hablamos de revelado queremos decir una serie de ajustes básicos que afectarán a toda la imagen y cuyo uso está aceptado en el mundo de la fotografía y sus más prestigiosos concursos, tal que si nuestro archivo digital fuese el negativo de la fotografía analógica y estuviésemos revelándolo. Una cosa diferente es el procesado en el que utilizaremos programas de edición más potentes y podremos actuar por zonas aisladas y quitar o poner a nuestro antojo.
Yo os hablare de Capture NX de Nikon, el programa nativo de Nikon para el revelado de sus raw, pero las funciones son más o menos parecidas a Cámara raw, Lightroom o cualquier otro programa de edición. Para un revelado básico, más que de sobra para una edición más artística, ya necesitaríamos algún programa de edición más potente. Y por supuesto os contaré mi forma de trabajar, que es sólo una forma personal de hacerlo, cada cual tiene sus preferencias en cuanto al revelado.
En primer lugar utilizaré el comando exposición para buscar la luminosidad deseada (siempre y cuando quieras cambiarla para obscurecer un poco o para aclarar)
A mi ya me convence tal cual (fijaros que tenemos un histograma bastante ajustado tanto a los blancos como a los negros) pero como ejemplo vamos a ver qué ocurre si restamos ½ diafragma de luz o si lo sumamos.
El siguiente paso es el comando altas luces, con el que podremos recuperar información de las zonas más claras de la imagen, siempre y cuando hayamos hecho una correcta exposición en el momento de la toma.
El siguiente paso será sombras que es el opuesto al anterior, aquí recuperaremos información en las zonas obscuras, recordar que tal como hemos hablado durante el curso este es uno de los pasos más críticos ya que si no hemos expuesto correctamente en el momento de la toma, un uso muy agresivo de este comando va a generar ruido en nuestras imágenes.
Y por último utilizaré los comandos contraste y brillo para darle más fuerza a la imagen, aquí depende del gusto de cada uno, podemos estirar nuestro histograma hasta los blancos y los negros puros o respetar el contraste tonal que consiguió nuestra cámara. Ya veis unos pasos muy sencillos con los que finalizaremos nuestras imágenes en un par de minutos, siempre y cuando hayamos trabajado bien en el momento de la toma.
