<<< Las bebidas culturalmente son significativas, nos definen, nos caracterizan. Es fácil reconocer a un argentino o uruguayo en una playa o en el parque por que el mate siempre estará a la vista.
Cuando era un niño siempre veía a mis padres tomar mate, y yo ahi compartiendo un momento con ellos si demasiada curiosidad. Pero un mañana cualquiera decidí que quería probar y así fue la primera vez, el primer momento de intimidad “adulta” de ese niño, aprendiendo a pensar, aprendiendo el silencio de ese ritual.
Sin dudas hay otro momento de inflexión y es cuando nuestra familia nos ofrece el primer mate con ellos y lo tomamos con cuidado y de alguna manera mágica o mística, para algunos, sentimos que estamos madurando, que somos parte del clan, y recordamos ese momento toda la vida.
Hoy tome mate y ahí me vi, como niño que en silencio aprendía a pensar>>>