Kamala Harris debe reescribir la historia del liderazgo político femenino para ganar. Es tiempo de mujeres.
En la recta final de la campaña electoral presidencial de Estados Unidos, existe una posibilidad real de que una mujer llegue por primera vez a a la presidencia de este país. ¿Pero Kamala Harris tiene lo que se necesita para hacer historia?
Hoy en día las mujeres en puestos de liderazgo, representan colectivamente el status cambiante de las mujeres en la sociedad. En general, se asume que las mujeres en la política son una minoría, que sale de una posición de desventaja. Cuando tienen éxito, se considera excepcional, en un sistema masculino que anteriormente estaba fuera de los límites.
Pero, debido al complejo funcionamiento del género, la raza, la clase y la cultura, no es tan sencillo, como muestra la discusión sobre la identidad birracial de Harris.
Agente de cambio social
El liderazgo de Harris crea una nueva forma de gobernar, anima a más mujeres a unirse a ella en el poder y a desafiar el sexismo, la homofobia y el racismo. En términos más generales, trabaja para transformar la gobernanza mundial, promoviendo el pluralismo y la tolerancia.
Kamala Harris representa una agenda económica y social progresista y la continuidad en la política exterior del gobierno en turno. Harris promete construir sobre el legado de Biden, pero ir más allá en temas como el aborto, la educación y el cambio climatico. Su mayor punto ciego es el decepcionante manejo de la crisis migratoria.
La política ha sido un terreno predominantemente masculino, donde las voces femeninas han sido relegadas al margen. Sin embargo, a lo largo de la historia, las mujeres han luchado incansablemente para reclamar su lugar, en este espacio crucial de toma de decisiones. Hoy en día, estamos presenciando un cambio trascendental: un creciente número de mujeres están ocupando la presidencia de varios países, y están marcando una diferencia significativa en la sociedad.
Fotos: Wikimedia Commons
El papel de las mujeres en la política no se limita simplemente a la representación de su género, sino que abarca una amplia gama de temas y perspectivas que enriquecen el debate político y promueven una mayor inclusión.
Harris aporta una sensibilidad única a temas como la igualdad de género, la educación, la salud reproductiva, la violencia doméstica y muchos otros asuntos que afectan profundamente a la sociedad en su conjunto. Su presencia en los órganos de gobierno, no sólo asegura una representación equitativa, sino que también garantiza que las políticas y decisiones tengan en cuenta las necesidades y preocupaciones de la mitad de la población.
El desafío de Harris
Kamala Harris destaca de manera obvia dentro del grupo de agentes de cambio. Es altamente educada y tiene experiencia en el servicio público en un sistema politico dominado predominadamente por hombres. Este fenómeno describe la discrepancia entre lo que los votantes reportan en sus opiniones y actitudes en las encuestas o a los encuestadores. Las encuestas están tan reñidas que ninguno de los candidatos tiene una ventaja significativa en esta recta final. El resultado de ésta elección dependera de los votos en los siete estados péndulo y un número de condados. El género está jugando un papel crucial en estas elecciones estadounidenses, y no se trata sólo de Kamala Harris; sino las prioridades para el pueblo estadounidense en general y la población femenina.
Sólo queda por ver, si Estados Unidos, el mundo y la propia Harris están listos para este papel y concentrar un liderazgo femenino alfa por primera vez, entre muchos desafíos en una elección sumamente reñida.
Texto ©Penelope Sanchez Portillo 2024