•Entrenar la mirada |Sembrar asombro, cosechar sabiduría• -III-

La jardinería volvió a sembrar en mi el asombro y la maravilla con cada brote nuevo que observo perdida en admiración.

La jardinería agudizo mi sensibilidad al punto de sorprenderme a mi misma con los ojos empañados al ver por ejemplo un primer tallo abriéndose paso tiernísimo entre la solida superficie, ese tallo que antes fue semilla que encontre en quien sabe que camino, y que plante creyendo, pero sin mucha espectativa.

La jardinería se ha vuelto la mejor maestra para mi impaciencia, el mejor remedio para mi ansiedad. La jardinería es una actividad en la que me pierdo de lleno y me entrego por completo. Y es justo ahi que me reencuentro, sucediendo simple, despreocupada, rompiendo y transpasando la trampa del tiempo.

Y es que descubrí que la jardineria no es otra cosa que una magnifica via de reconexion consciente con la tierra a la cual pertenecemos (y no viceversa). Es esa tierra del tiempo biologico y real que todo nos enseña, y de la que nos hemos alejado tanto, viviendo en ciudades que la cubren de cemento, regidos por un tiempo artificial, que en su tiranía con las exigencias contemporaneas, arrasa llevandose nuestras vidas. Parece mentira pero esa tierra que nos engendro, que fue y es siempre objeto principal de culto para las culturas originarias, y que es la fuente de nuestro alimento desde siempre, esa tierra que explotada lo da todo, quedo reducida a un simple objeto carente de vida, distribuido en gondolas de supermercados y florerías. Y es ahi, entre tantas otras razones, en ese feroz proceso de industrialización que se origina parte de la gran desconexión que las personas sufren con la naturaleza, ahi donde perciben bienes de consumo en lugar de vida, donde el resultado es el unico fin, y el proceso que lo origina queda completamente fuera del punto de interes, descalificado, no se percibe, ni se ve.

Por eso y por todo lo que me es imposible de explicar

El regalo mas sublime de mi jardín no son sus flores, sino enseñarme a ver de otra manera y a transformarme a partir de esa nueva mirada -todos y cada uno de los días en que existo-

La naturaleza es y será siempre la fuente mas vasta y pura de aprendizaje y sabiduría.